Evita abusos: lo que debes saber sobre los Despachos de Cobranza

Ante el escenario económico adverso, la morosidad en el pago de créditos comienza a convertirse en un problema para las instituciones financieras, esto traerá consigo un aumento en la carga de trabajo de los despachos de cobranza en sus intentos por recuperar lo debido por los abrumados deudores en mora.

Mucho hemos hablado en este blog -y lo seguiremos haciendo- sobre la importancia de manejar inteligentemente las deudas, haciendo énfasis en que si no somos capaces de contenernos ante las compras de impulso, mejor ni nos metamos con los créditos.

Pero bueno, creo que, al menos por ahora, el consejo de las finanzas libres de deudas malas está un poco fuera de tiempo y si estás leyendo esta entrada, probablemente sea porque se te encuentras inmerso en un problema serio de deudas. No es momento de reproches ni de regaños, sino de salir de este lío, ya luego veremos lo de tu renacimiento financiero.

Ante lo que enfrentarás por tu imposibilidad de pagar tus adeudos a las instituciones financieras, hay ciertas cosas que debes saber para que no se cometan abusos hacia tu persona o patrimonio, ni caigas presa del pánico.

En primer lugar, NO IRÁS A LA CÁRCEL por no pagarle a los bancos, cajas populares, uniones de crédito o sociedades financieras (ya sean Sofomes o Sofipos), ya que el artículo 17 constitucional establece en su último párrafo que nadie puede ser aprisionado por deudas de carácter puramente civil.

La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF) cuenta con el Registro de Despachos de Cobranza (REDECO), el cual permite conocer la denominación o razón social, domicilio, correo electrónico y teléfonos de los despachos que sean contratados por las Entidades Financieras para la recuperación de su cartera vencida. Todo despacho que realice gestiones de cobro, negociación o reestructuración de créditos para entidades financieras, deberá estar inscrito en el REDECO.

De conformidad con la Ley para la Transparencia y Ordenamiento de los Servicios Financieros, así como las Disposiciones de Carácter General Aplicables a las Entidades Financieras en Materia de Despachos de Cobranza, emitidas por la CONDUSEF, las Entidades Financieras (bancos, cajas populares, Sofomes, Sofipos, Uniones de Crédito, etc.) serán responsables de que los Despachos de Cobranza cumplan con las siguientes condiciones:

- Identificar plenamente al deudor, obligado solidario o aval, antes de establecer el primer contacto.

- En el primer contacto, indicar al deudor el nombre del Despacho de Cobranza, medios de contacto con la persona responsable de la Cobranza, Entidad Financiera que otorgó el crédito, contrato u operación motivo de la deuda, monto del adeudo y condiciones para liquidarlo, medio de contacto donde la Entidad Financiera recibirá quejas por malas prácticas en la Cobranza y que los pagos sólo podrán hacerse en la Entidad Financiera que otorgó el crédito.

- Dirigirse al deudor de manera respetuosa y educada.

- Documentar por escrito el acuerdo, negociación o reestructuración a que haya llegado con el deudor y entregar la información a la Entidad Financiera.

- No utilizar nombres o denominaciones que se asemejen a las de instituciones públicas.

- No utilizar números de teléfono que aparezcan como "oculto" o "privado".

- No deberán amenazar, ofender o intimidad al deudor, sus familiares, compañeros de trabajo o cualquier otra persona que no tenga relación con la deuda.

- No deberán realizar gestiones de cobro a terceros, como referencias personales y beneficiarios.

- No deberán enviar documentos que aparenten ser escritos judiciales.

- No deberán establecer listas negras o anuncios en los que se haga pública la negativa de pago de los deudores.

- Tienen prohibido recibir pagos de los deudores.

- No deberán hacer gestiones de cobro a menores de edad o a adultos mayores, salvo que éstos sean los deudores.

- Las gestiones de cobro deberán hacerse en los domicilios proporcionados por la Entidad Financiera o el deudor.

El incumplimiento a una o más de las condiciones anteriores constituye una mala práctica en la cobranza y el motivo de queja ante la CONDUSEF. 

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